martes, 27 de diciembre de 2016

debajo del edredón no hay miedo

la vida pasa.
pero de largo.
 
debajo de las mantas de invierno no transcurre el tiempo, no existe la mañana, no llega el mediodía. entre las sábanas, cuando estoy despierta pero aún no me he levantado, no hay prisa, no hay ansiedad, es sábado, tengo seis años, no hay obligaciones. antes de poner un pie en el suelo, cuando hace ya un rato que ha sonado el despertador, la respiración es tranquila, el silencio no es alarmante, el corazón va a un ritmo normal, los pulmones no se vacían sin haberse llenado del todo. sobre el colchón sólo hay sueños felices, nadie llora de tristeza, todo es cálido y apacible.
 
pero hay que levantarse.
y la vida llega.
y te golpea.

viernes, 23 de diciembre de 2016

no conocéis el delito

os limitáis a decir

eres demasiado dura contigo misma

seguro que no es para tanto

no os interesa la versión real de los hechos

la versión objetiva

os limitáis a decir

eres demasiado exagerada

seguro que es una tontería

pero yo tengo miedo todos los días

porque soy

tonta tonta tonta

tengo que vivir con lo que hice

o con lo que no hice

pero dije

sábado, 17 de diciembre de 2016

hoy es diecisiete, pero esto es en honor al año que viene

no me gusta el diecisiete, es un número feo.

diecisiete es la edad que tenía cuando empecé a sospechar que algo no iba bien en mi cabeza.
diecisiete son las horas que paso en ayunas cuando estoy triste.
diecisiete son las listas de reproducción que tengo en el móvil y que no escucho porque no me gusta la música.
las cinco de la tarde es la hora a la que solíamos quedar.
diecisiete es el número de veces que me he hecho un blog.
diecisiete es el número de veces que he fracasado haciéndome un blog.
diecisiete son las letras que tenía el nombre de usuario de mi antiguo Instagram.
diecisiete son los nombres que componen mi lista de amores platónicos.
diecisiete es la edad que me separa de Esbacr.

jueves, 15 de diciembre de 2016

mi cuerpo frágil no soporta el paso de las horas

no quiere oír hablar de que el tiempo lo cura todo. todo es mentira. no quiere saber nada de nadie. no quiere despertar. no quiere salir de la cama si despierta. no quiere desayunar si sale de la cama.

mi frágil cuerpo no aguanta el peso del día. el sol sobre sus hombros, el viento a su espalda, el sonido de la vida abrazándolo. eso no es un abrazo, es una mortaja. no desea saber qué debería hacer para. sólo desea que no le duela la cabeza. que no le duela el estómago. que no le duela la garganta. que no le duelan los muslos. que no se duela a sí mismo.

mi cuerpo frágil no es capaz de sobrellevar la tristeza. se le cae de las manos cuando lo intenta. las bolsas de los ojos ahora son balsas. balsas tan grandes por las que se podría navegar. pero de un agua tan fría que es imposible.

mi frágil cuerpo no entiende las despedidas. sólo comprende el desprendimiento. y lo comprende porque es tan débil que él mismo se ha soltado de la vida sin parpadear. se ha soltado de la vida sin quererlo. ha caído al suelo y ahora no puede levantarse. no puede levantarse y ahora el tiempo se niega a ayudar.

lunes, 12 de diciembre de 2016

domingo, 11 de diciembre de 2016

(atentos a la tele)

cualquier día de estos, saldrán mis vecinos en la tele diciendo que yo siempre saludaba.

viernes, 9 de diciembre de 2016

las personas no suelen concebir que las otras personas no sean como ellas

la mayoría, por ejemplo, no concibe que yo no pueda entrar en una librería y preguntarle al dependiente si tienen X libro.

yo, por ejemplo, no imagino a nadie que no coja unas tijeras y se haga cortes en los brazos. para mí es liberador. forma parte de la terapia. significa que yo y sólo yo tengo el control de mi vida.

mucha gente no entiende que, si voy a una fiesta y no bebo alcohol, no voy a divertirme porque si no bebo alcohol no voy a relacionarme con nadie.

yo no comprendo cómo alguien puede tener ganas de verme.

domingo, 4 de diciembre de 2016

todo el profesorado puso sus esperanzas en mí

—dijeron—
tú llegarás lejos
—dijeron—
muy bien
—pensaron—
increíble
—repitieron—
tú llegarás lejos
 
y yo,
 
que sólo quise llegar hasta donde no existe el miedo,
 
me negué a seguir cargando con las aspiraciones de los que nunca se han tenido que limpiar solos los mocos y las lágrimas después de ver cómo se rompen sus sueños por culpa de no tener con quién cumplirlos
 
y ahora me arrepiento, claro
 
me arrepiento de no haber sido así desde el principio de los tiempos
para que el profesorado no pusiera vanamente sus esperanzas en mí

me da tanta pereza todo

me digo voy a ahogarme en la bañera pero tengo que abrir el grifo. y poner el tapón. y el agua. regular la temperatura del agua. (quiero ahogarme en la bañera, no morir de congelación).

me digo sal de la cama. sal de la cama. muy bien, te has sentado, es un paso pero alejo las sábanas y tengo frío. (sigo sin querer morir de congelación). así que vuelvo a tumbarme. vuelvo a tumbarme pero no del todo: porque también me da pereza volver a la posición anterior. (ya que estoy aquí, para qué voy a volver).

me digo cállate y me hago caso. menos cuando no puedo más. llevas más horas callada que sin comer. diecisiete. di alguna tontería. la que sea. llevas demasiado tiempo sin hablar. se te está secando la boca. di una gilipollez y vuelve a tu cuarto. aráñate la nuca de camino a tu cuarto. ahora sangra. está bien, pero no vuelvas a hablar en tu vida.

me digo muérete pero qué vagancia. los cuchillos están en la cocina, las pastillas están sobre la mesa, la ventana está a diez centímetros de ti. pero hay que abrirla. peor. hay que levantar el brazo para abrirla. y qué pereza.

me digo te da tanta pereza todo, que no sé ni para qué me molesto.

me repito háblale. dile que la echas de menos. dile que a veces piensas en ella. que también sonríes melancólicamente cuando sabes que aún respira. aún respira. como tú. dile algo. dile que aún respiras. habla con él. no le molestan tus mensajes. no le pareces estúpida. él también piensa en ti. él también piensa en ti.

no te lo crees ni tú.

viernes, 2 de diciembre de 2016

miércoles, 30 de noviembre de 2016

domingo, 27 de noviembre de 2016

no sé quién soy

sólo se que a veces no me importa pasar hambre porque de todas formas no quiero estar viva. sólo sé que a veces como mucho porque no me importa engordar porque de todas formas no quiero estar viva. sólo sé que me pone nerviosa que alguien se siente a mi lado en la biblioteca y vea qué libro tengo entre las manos. sólo sé que me da un vuelco el corazón cuando alguien me pregunta a dónde voy porque no sé a dónde voy porque de todas formas no quiero estar viva. sólo sé que no puedo estar más de treinta minutos sentada en el mismo banco por si la gente empieza a sospechar que sólo he entrado en el parque para sentarme en ese banco. sólo sé que tengo miedo de salir sin compra de una tienda y que piten las alarmas aun sabiendo que no he robado nada. sólo sé que me muero por que me llamen por teléfono y lo tengo siempre en silencio porque me muero cada vez que suena. sólo sé que no me importa no hacerme la cama porque de todas formas no quiero salir nunca de ella. sólo sé que no me importa no dormir en una cama porque de todas formas no quiero salir nunca con vida.

viernes, 25 de noviembre de 2016

una vez traduje un poema mío al inglés

This is not poetry

You look at me. 
You look at me and smile. 
You look at me, smile and blink. 
You blink slowly. 
So much, that I almost notice how my eyes dry up. 
And my tears dry up. 
And my wounds heal. 
And I stare at you and my heart becomes paralysed. 
And I hear your heart beating. 
And I hear your breathing. 
And I breathe hard. 
So much, that you almost notice how your lungs fill with air. 
And your eyes fill with memories. 
And your scars fill with my kisses of yesteryear. 
And I kiss you again very slowly. 
I kiss you, laugh and hug you. 
I kiss and laugh. 
I kiss you. 
 

And you kiss me.

jueves, 24 de noviembre de 2016

domingo, 20 de noviembre de 2016

Echo de menos muchas cosas

No sé.
Montones de cosas, por así decirlo.
No sé.
Echo de menos.
Echo de menos mi antiguo Instagram.
A veces me busco,
pero me dicen
que no se han encontrado resultados.
Ya, claro:
no se han encontrado resultados...
Yo sé que estoy ahí, en alguna parte,
pero quieren ocultármelo.
Quieren fingir que no existo,
que no existí
antes de empezar a buscarme,
pero yo sé que sí lo hice.
Yo sé.
Echo de menos a muchas personas.
No sé.
Mogollones de personas, por así decirlo.
Mogollones de personas a las que he besado
en la boca
en la frente
en la mejilla
en mis sueños.
No sé.
Echo de menos
a N como amigo
a M como amante
a L como imbécil.
No sé.
Echo de menos
llevar un mechero en el bolso
delinearme los ojos
mear en los descampados.
Echo de menos
escribir nuestros nombres
en la superficie sucia
de los coches
llorar delante de la gente
hablar delante de una cámara.
No sé.
No sé.

domingo, 13 de noviembre de 2016

a los ocho años era feliz y me prometí morir a los veinticinco

tenía una explicación. esa señora me comió el coco y me hizo creer en Dios. no podía llegar a vieja porque no quería pasarme la eternidad en el cielo con aspecto ajado y artritis. tenía que morir joven y bella, pero sin ser pequeña.

a los catorce la cosa cambió por completo. (vaya que si cambió...). tenía que morir en ese mismo momento, el momento más feliz de mi vida, pero no lo hice. y desde entonces duermo fatal.

a los quince me prometí que, si a los veinticinco estaba viva, soltera, independiente y sin hijos, recurriría a la inseminación artificial. (los sueños hay que cumplirlos antes de morir).

ahora tengo veintidós y hace tiempo que no tengo esperanzas. no debí salirme del plan inicial. no debí dejar de creer en Dios. ahora si no llego a los veinticinco significará que no hice todo lo que pude. ahora si llego a los veinticinco es probable que llegue también a los veintiséis, rompiéndole así el corazón a la niña feliz de ocho años que fui.

sábado, 12 de noviembre de 2016

domingo, 6 de noviembre de 2016

leer me pone cachonda

no la novela erótica
no la poesía contemporánea
no las escenas de sexo en el diario de una escritora

sino
—el simple acto de—
leer

martes, 1 de noviembre de 2016

Medusa

mis vecinos preguntando si subo sin haberme visto aún me convierten en estatua

prefiero que crean que no hay nadie a compartir el ascensor

nadie sabe de mi debilidad

este cuerpo que tengo no es un cuerpo. lo supe desde el primer día en que me caí al suelo.

este cuerpo que poseo y que no controlo porque no me pertenece no es de carne y hueso como todos los demás cuerpos que son cuerpos y sí pertenecen a sus dueños.

este cuerpo que habito es de gelatina y tiembla a todas horas. no sabe a fresa, pero sabe que la punta roma también hace daño. este cuerpo en el que anido es una flor marchita.

(estoy enferma y mi llanto no es bálsamo / estoy enferma y no me quiero curar).

este cuerpo que ocupo es un pájaro con las alas rotas, es un zorro herido, es una hormiga sin fuerzas, pero nadie sabe de su debilidad.

este cuerpo que tengo no es un cuerpo. lo supe desde el primer día en que me caí al suelo

 

y ya no me pude levantar.

lunes, 24 de octubre de 2016

he visto caer la sangre como la vida

la sangre que me recuerda que en esta tierra no crecerá la fruta. la sangre que me recuerda que de estas ramas no surgirán flores.

he visto caer la sangre como la nieve en las montañas. siendo yo más un volcán. siendo yo más de escupir muerte que vida.

he visto caer la sangre como si fuera yo la que se suelta y se precipita hacia el vacío. me he visto caer. me he visto roja. recién nacida y tiritando. me he visto llorar tras el golpe en la espalda.

me he visto caer como la sangre que resbala por mis muslos sin necesidad de avisarme. como el semen que sabe que está todo controlado. como la lágrima que en el fondo ya sabía que hoy también iba a llover.

domingo, 23 de octubre de 2016

(sobre la impresión equivocada)

la doctora me ha mentido

—me dice—

ya no estás enferma

—me dice—

ya no hace falta que vuelvas

hasta el día de la revisión anual

(pero yo me siento débil)

acaricio la piel y noto el bulto

¿es que no lo ve?

está aquí

mire

toque

nótelo con sus manos

está creciendo

(pero no abro la boca

no le digo nada)

marcho a casa y siento cómo crece la enfermedad

me duele

me escuece

se enrojece

(pero no quiero ir al médico

prefiero dejarlo pasar)

me miro al espejo y tengo miedo

si crece habrá que operar

—me dijo—

seguramente prefiera no operar

—me digo—

ya no estás enferma

—me dice—

no estás enferma

enferma, enferma

no hay por qué alarmarse

pero si sigue así habrá que operar

¿es normal que se desmaye?

ya no estás enferma

ya no hace falta que vuelvas

hasta que te vuelva a pasar.

viernes, 21 de octubre de 2016

echo de menos la ternura de la infancia

esa inocencia. esa ingenuidad.

no los juegos en la mesa pequeña del comedor.
no las meriendas en el parque.
no la exploración del cuerpo blando y virgen.
no cambiar de canal cuando salen las noticias.

echo de menos creer. soñar.
tener fe en que de mayor seré lo que yo quiera.

ahora sé que no es así.
ahora sé que me suicidaré.
dentro de diez años.
cuando me despierte y vea que no tengo hijos.
cuando me despierte y vea que no tengo amigos.
cuando me despierte y vea que sigo enferma.

martes, 18 de octubre de 2016

siento más vergüenza que miedo / cuando pienso que me muero

¿Qué pasará si me despierto y no hay nadie? ¿Si apenas han pasado unos minutos? ¿Si no soy capaz de fingir ser tan fuerte?

¿Qué pasará si me despierto y no eres tú el que me coge de la mano? ¿Si toda la manada abre los ojos a la vez? ¿Si quieren saber por qué me fui de la cueva?


(Tengo miedo de ir tan lejos que no pueda volver. Pero también de arrepentirme si no me marcho).



No quiero saber qué se siente, quiero que lo sientan.

lunes, 17 de octubre de 2016

mamá, ya no me duele el corazón

ya no me importa. yo no soy valiente, simplemente no estoy muerta. del todo. sobrevivo a base de mentiras. no te preocupes, todo va a salir bien. mañana madrugo. no te preocupes, aún hay tiempo. no estoy loca. mamá, seguramente nunca tengas nietos, pero más me duele a mí. nadie quiere estar con quien no esconde su tristeza. porque se pega. ni siquiera los hispanoparlantes saben distinguir entre ser y estar. triste. mamá, ya no le duelo al corazón. ya se ha acostumbrado.

mi vida está llena de pequeños detalles que por separado son tonterías, pero que juntos hacen que todo sea una mierda

por ejemplo: no importa a qué hora salga de casa, siempre veo al autobús irse sin mí. por ejemplo: no importa qué talla compre, las bragas nuevas siempre me vienen pequeñas o grandes. por ejemplo: mi ojo derecho no tolera al cien por cien la lentilla. da igual cuántas cuentas me haga en Instagram, ese tío que me cae tan mal siempre me encontrará y me seguirá. por ejemplo: por las mañanas sólo tengo hambre después de haberme gastado el dinero del almuerzo en otra cosa. por ejemplo: sólo me saludan cuando no saludo y cuando saludo no me saludan. por ejemplo: con el frío pasa lo mismo. por ejemplo: con los amigos también.

domingo, 16 de octubre de 2016

decidle a mi madre que me quiero

las cosas no siempre fueron así, claro, antes todo esto era esperanza. antes sonreía en las fotos. antes me dejaba abrazar.

mi cuerpo es ahora la colección de un museo: se mira, pero no se toca. en este bar ya no se fía a nadie. la familia son las flores de un cerezo, pero en Navidad. 

antes era idiota pero se me daba bien escribir. ahora además no sé escribir.

jueves, 6 de octubre de 2016

digo que adoro mi cuerpo pero es mentira

no me gustan estas tierras lejanas
apartadas de la civilización
yo soy más de ciudad
donde todo es firme y rígido
yo soy un campo de flores marchitas
el vientre es yermo
el pecho, llano
los brazos son sólo ramas caídas de un viejo árbol
la piel se agrieta y los ojos
son nubes cargadas de miedo
la niña que fui murió de sobredosis de esperanzas puestas en ella
qué son treinta y cinco mil cabellos al año comparado con perder la cabeza cada día
el frío ha hecho mella en mí
cada vez te echo menos de menos

miércoles, 5 de octubre de 2016

en casa

en casa todos están enfadados
en casa nadie habla
en casa nadie dice gracias
nadie dice que aproveche
en casa siempre hay silencio o gritos
y no puedo dejar de pensar
que es culpa mía
que yo he hecho que todos se odien
que yo con mi actitud sepulcral he hecho
que todos se den la espalda
que yo he provocado el envenenamiento
en casa ya sólo se está bien si no hay ni un sólo ruido

lunes, 3 de octubre de 2016

cuando es primavera

el cerezo florece y
la fruta se desprende

suave
dulce
roja

como el hibisco que lame mis muslos

hace tiempo que ha dejado de llover

caen rubíes como lágrimas de la montaña
la lava serpentea ardiente sobre la tierra

blanda
blanca
baldía

la endurece

las rodófitas me asfixian
los indios bailan el baile
del sol

y yo

meto el dedo en la llaga