Los poemas ya no
forman parte de mi
forma de expresarme
Y sin embargo ha dejado
de gustarme la prosa
Ha dejado
de gustarme la prosa
y sin embargo me encuentro
escribiendo una novela
He dejado -no sé cuándo- de buscar piso
He dejado -hace meses- de ir al psiquiatra
Pero el tiempo para mí pasa de manera inconstante
y cuando digo meses podrían significar unas semanas
y cuando digo años podrían significar sólo unos días
Son las tres de la mañana
Pienso en ti cada noche
Aún estamos a octubre
Tu voz cada vez más difusa
se esconde en el rincón
más oscuro de mi mente
Ya no estoy segura de
ser capaz de reconocer tu rostro
ni aunque volviera a trabajar
en el mismo hospital
en el que nos conocimos
Sólo recuerdo tu nombre
Y estoy empezando a pensar que me lo inventé