Desde que cumplí los veinticuatro años,
mis ciclos menstruales se han
vuelto menos irregulares
—que no más regulares—
Ya no me duran
treinta/treinta y cinco/cuarenta días
—dependiendo del mes en el que
estemos, dependiendo de si mi útero está o no enfadado conmigo y quiere o
no que me baje justo ese día tan importante o puede esperar un poco—
Ahora la regla me baja cada
veintisiete/veintiocho/veintinueve
días
Ahora que me queda menos de un año para los veinticinco,
he
empezado a trabajar
Aún no sé cuál es mi sueldo
Aún no sé cuándo
prescindirán de mí
Aún no he hecho ninguna cagada importante, así que
aún no hace falta que me torture
También he empezado a abrirme más a
las personas
—benditos sean los eufemismos—
y creo que todo esto
significa algo
Pero no os puedo decir el qué
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